Cómo lidiar con el fracaso (y reponerte)

Al estudiar mercadotecnia y durante toda tu vida, tendrás que enfrentar el fracaso, pero puedes lidiar con él

Vivimos en una sociedad en la que tener éxito es indispensable, en la que todo se mide acorde a lo que logramos. Esto ha hecho que dejemos de ver el fracaso como una oportunidad para aprender y crecer, y que en su lugar lo empecemos a ver como una barrera que solo nos recuerda nuestras limitantes y debilidades. Al estudiar mercadotecnia, debemos estar conscientes de que nos enfrentamos a un camino competitivo en el que además, haremos muchos experimentos que no necesariamente saldrán siempre bien, sin que eso signifique que debemos claudicar.

Lo cierto es que el fracaso nunca es el final, solo es un indicador de que hay cosas a las que debemos ponerles más esfuerzo para poder llegar a los resultados que deseamos. El miedo al fracaso es algo real, es algo que se activa en nuestro cerebro, pero que en realidad debería ser usado para esforzarnos más y no para dejarnos paralizados de miedo. Estudiar mercadotecnia exige que seas audaz, y que te sientas capaz de sobreponerte al miedo al fracaso por encima de todo.

Pero, ¿qué pasa si fracasas, a pesar de todo tu esfuerzo? Nada terrible, siempre y cuando sepas cómo lidiar con ello. Es importante reconocer el fracaso cuando ocurre, te ayudará a identificar en qué debes enfocarte para que puedas manejar la situación de forma distinta en el futuro. Cambia tu perspectiva respecto al fracaso, y una vez que lo empieces a ver con una luz nueva, con un cambio mental, podrás transformar tus acciones en otras que te lleven al éxito.

Algo que debes hacer cuando fracasas, es ir desde el principio y tratar de encontrar qué sucedió. Si al estudiar mercadotecnia fallas en un proyecto, regresa al punto A, vuelve sobre tus pasos y estudia cada una de las decisiones que te llevaron hacia ese resultado, y una vez que las identifiques, puedes empezar a pensar como reemplazar esas acciones la próxima vez con unas mejores que te lleven al éxito.

Lo importante es que aceptes la responsabilidad, pero que no te rindas. No eches las culpas a alguien más, no finjas que no ocurrió. Acéptalo, y recuérdate siempre que incluso los fracasos que parecen más grandes, son un empujón para ser mejor al estudiar mercadotecnia y en el futuro. Y así como te reflejas en los fracasos, refléjate en los éxitos para recordarte todo lo que eres capaz.

No importa qué tan duro sea el fracaso, estudiar mercadotecnia ya es un indicador de que eres más fuerte que él.